Madrid, el sábado 17 de noviembre en el salón de actos del centro cultural ISAOM (Indian Sindhi Association of Madrid) se celebró el Nama-karana samskara o sacramento hindú de recibir el nombre del hijo de Sarika Bhagchandani y Alejandro Rubia. La ceremonia fue oficiada por el sacerdote hindú Juan Carlos Ramchandani (Krishna Kripa Dasa) amigo de la familia desde hace más de 30 años. La sala fue engalanada para la ocasión y el escenario se convirtió en un bello templo. En el centro se sentaron los padres con él bebe, les acompañaban a su derecha los abuelos paternos, Amador Rubia y su señora María Dolores Flores y en la izquierda el abuelo materno Mahesh Bhagchandani, su esposa (q.e.d.) Neetu/Kanta Bhagchandani estuvo presente en una foto en el altar. La ceremonia comenzó con unas palabras de Ramchandani donde explicó el origen e importancia de los samskaras, sacramentos del hinduismo, explico como el Nama-karana o recibir un nombre hindú, es dar la bienvenida a los recién nacidos y a los adultos que desean entrar en la espiritualidad hindú. Luego invito a los asistentes a que meditaran durante unos instantes en los maestros y maestras que han tenido a lo largo de su vida.
El honor de decir el nombre del niño recayó en Vishal, hermano de Sarika quien se desplazó expresamente desde Londres para asistir a la ceremonia. Como indica la tradición, el tío materno susurro tres veces el nombre elegido por los padres al niño en su oído derecho. El nombre de acuerdo al nakshatra (constelaciones en la astrología hindú) debía de comenzar por la letra “D”, él bebe recibió el nombre de Dhiraj. El sacerdote explicó el significado de Dhiraj:”dhíra significa aquel que es muy inteligente, ecuánime y estable. Dhiraj significa el rey del conocimiento, aquel que ha alcanzado el equilibrio de mente, cuerpo y alma”. Después de los aplausos, Ramchandani leyó algunos párrafos de la carta astral (janam patri en hindi o chatti en sindhi), donde explico de forma breve las cualidades y naturaleza de Dhiraj de acuerdo a la posición de los astros el día de su nacimiento.
Luego se hizo Homa, ceremonia de fuego donde se recitaron mantras (himnos sagrados) protectores para Dhiraj y se hicieron ofrendas de ghi (mantequilla clarificada) samagri (hierbas y raíces aromáticas) y granos de arroz al fuego sagrado. Durante todo el ritual el niño estuvo muy tranquilo, finalmente los padres y abuelos lo bendijeron con hierba kusha empapada en el agua consagrada durante la ceremonia. La ceremonia concluyo con la bendición a Dhiraj por parte de Ramchandani con el sathari (yelmo que lleva una réplica de los pies del Señor Vishnú). Luego todos los asistentes subieron al escenario a dar sus bendiciones al niño y expresar su enhorabuena a los padres y abuelos que estaban muy felices.
La celebración concluyo con una exquisita comida hindú vegetariana y el reparto de dulces a los familiares y amigos invitados. Desde Ceuta se desplazó buena parte de la familia Dhanwani, muy conocida y querida en nuestra ciudad, que quisieron estar presente acompañados de sus esposas e hijos en tan hermoso evento. El colofón lo puso una emotiva foto de familia que estuvo presidida por las fotos del abuelo Doulat Dhanwani y su hija Kanta/Neetu ambos fallecidos hace unos años, pero que estuvieron muy presentes a través de sus bendiciones durante toda la ceremonia.
Las familias Bhagchandani, Dhanwani y Rubia agradecieron mucho la ceremonia y explicaciones de Juan Carlos Ramchandani, así como el reportaje fotográfico hecho por su pareja Isa Gutiérrez.